lunes, 26 de septiembre de 2011

Press START

Comienza el otoño, una estación que inspira melancolía, novedad y vuelta a la necesitada rutina. El paisaje se tiñe de colores marrones y amarillentos, el viento esparce las hojas por el suelo y a su paso todo se llena de belleza. A su vez, caras tristes ponen fin a un lindo verano para dar la bienvenida al trabajo que, aunque aburrido, siempre depara nuevas y maravillosas sorpresas.

Echa un vistazo a las calles de tu ciudad y observa: la vestimenta de la gente cambia en dirección paralela al color del cielo. Los escaparates de las tiendas muestran sus mejores prendas y las nuevas tendencias que se llevaran este otoño. Los coleccionistas debaten en su interior que nuevos objetos recopilaran para su repertorio, las empresas se ponen en marcha con futuros proyectos al rojo vivo y algunos inician una nueva etapa sin conocimiento alguno de que es lo que ocurrirá en los próximos meses.

Huele a castañas, libros nuevos, lluvia, en las principales urbes a humo contaminado, en ocasiones huele a olvido y en los mejores casos a empeño por realizar un sueño. Los amigos se reencuentran con alegría y se cuentan con entusiasmo cada una de las anécdotas que han vivido durante los meses de verano. ¡Que bello es quedar con tus seres mas queridos en el lugar de siempre y hacer planes para el nuevo curso!

También en el mes de septiembre llegan las despedidas, ese temido adiós a personas que acabas de conocer y posiblemente no vuelvas a ver o, simplemente, a familiares con los que has pasado la mayor parte del verano sin tener constancia del paso del tiempo. Aun así, es un hasta pronto mezclado con promesas y lagrimas de añoranza.

Pensad ahora en lo maravilloso que resulta, por ello, el arranque del otoño. ¿No creéis que es época de cambio y oportunidad de mejora? Para mi, representa empezar a formarse de nuevo y poder olvidar errores pasados que no aportan nada a uno mismo. Por todo eso, he elegido septiembre para comenzar mi Blog. ¿Sobre que escribiré? Ni yo lo se todavía. Solo espero que disfrutéis tanto leyéndolo como yo lo haré escribiendo.